Un estudio reveló que en Tucumán el cigarrillo sigue prendido en la mayor parte de la sociedad

Un estudio reveló que en Tucumán el cigarrillo sigue prendido en la mayor parte de la sociedad

Nuestra provincia ocupa el séptimo lugar entre las ocho con mayor cantidad de fumadores, ranking que es encabezado por Tierra del Fuego. La encuesta nacional fue realizada por el Indec y por la Sedronar en 51.000 hogares. Participaron personas de 16 a 65 años

NI SENSUAL NI PLACENTERO. Diferentes estudios científicos hechos en el mundo mostraron los daños irreversibles y las muertes que produce el tabaco. LA GACETA/OSCAR FERRONATO NI SENSUAL NI PLACENTERO. Diferentes estudios científicos hechos en el mundo mostraron los daños irreversibles y las muertes que produce el tabaco. LA GACETA/OSCAR FERRONATO
18 Abril 2010
Las espesas humaredas desaparecieron de los bares. Los tucumanos se acostumbraron a no encender cigarrillos bajo techo. Pero al aire libre el hábito está muy lejos de hacerse humo. Al menos eso es lo que reveló una consulta nacional que detalla que más de la mitad de la población de entre 16 y 65 años es fumadora.

La Encuesta Nacional sobre Prevalencias de Consumo de Sustancias Psicoactivas se llevó a cabo en 51.000 hogares de todo el país, siendo el trabajo más exhaustivo que se haya realizado por su dimensión (más del 90% de la población nacional). Trabajaron todas las direcciones de estadísticas provinciales, junto a la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar). La metodología que se usó es similar a la encuesta de hogares y a la de factores de riesgo que realiza el Ministerio de Salud.

Las encuestas se concretaron durante 2008 y los resultados terminaron de procesarse a comienzos de este año. Tucumán quedó ubicada entre las ocho provincias con más fumadores del país, que superan la media nacional. El ranking lo encabeza Tierra del Fuego con un total de 68,7 % de fumadores. No muy lejos, en el puesto número siete, está Tucumán: el 55 % de los encuestados tienen el hábito de prender cigarrillos. El último estudio del Ministerio de Salud de la Nación, en 2005, había mostrado que el tabaquismo afectaba al 34% de la población de Argentina. Por eso sorprendió a los expertos que la nueva encuesta determinó que una media nacional de fumadores del 52,5 %. No obstante, remarcaron que este trabajo es de mayor magnitud que el primero.

Cuestión de género

Lo que dejó en claro la investigación es que las pitadas son un hábito más masculino que femenino en todo el país. Y en Tucumán este fenómeno es más marcado que entras provincias: poco más del 60% de los hombres es fumador, mientras que entre ellas la cifra alcanza el 50, 5%. Las bocanadas de humo parecerían estar más ligadas a los jóvenes, según recalcan los expertos. Un fenómeno que se viene observando en los últimos tiempos en la provincia muestra que mientras hay más adultos que hacen un click y abandonan el tabaquismo, son más los adolescentes y chicos los que se suman a la costumbre de fumar, explicó Cristina Orellana, titular del Programa Provincial de Lucha Antitabáquica.

La experta se mostró en contra de las nuevas estadísticas: "no creo que más de un 30% fume; es necesario desmitificar la idea de que la mayoría de la sociedad fuma". Sin embargo, admitió que la problemática entre los chicos es muy preocupante. "Lamentablemente somos dueños de una triste estadística: el 15% de los chicos a los ocho años ya prueba el cigarrillo", especificó. Por este motivo, las estrategias de prevención que se realizan actualmente se inician en los jardines de infantes, adonde los expertos hacen hincapié en los estilos de vida saludable y en todos los daños que provoca el tabaco.

"El tabaco está muy presente en los chicos y jóvenes. El cigarrillo sigue generando un fuerte sentido de pertenencia en estos grupos", señaló Orellana, quien dijo que, por otra parte, en los consultorios de cesación tabáquica se hacen hasta un centenar de tratamientos cada año, con un éxito de 30%.

Tucumán fue pionera en el país con la creación de una ley antitabáquica. Desde junio de 2006 está prohibido fumar en los lugares públicos cerrados. La norma tiene un altísimo acatamiento y esto ha incidido mucho en la calidad de vida de quienes antes ponían en riesgo su salud por ser fumadores pasivos. No obstante, el consumo de tabaco no baja. Así lo demuestran las estadísticas oficiales publicadas hace dos semanas por el diario "La Nación": mientras en diciembre de 2004 (cuando no había restricciones en el país) se vendieron 186.000.000 de paquetes, en diciembre del año pasado esa cifra fue de 211.000.000. El bajo costo de los puchos, la falta de una política integral y la incompleta legislación sobre el tema serían algunos de los motivos por los que, según los expertos, el cigarrillo sigue todavía demasiado prendido en la sociedad.

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