29 Octubre 2009
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ESTA ESCRITO. Agassi pidió disculpas a sus fanáticos por el traspié.
BERLIN/LONDRES/NUEVA YORK.- La imagen inmaculada, casi angelical, del ex tenista estadounidense Andre Agassi quedó manchada cuando se reveló parte de su autobiografía, en la que confiesa el uso de drogas. Agassi (39 años) se retiró en 2006 al cabo de una exitosa y longeva carrera. En "Open", que se publicará en forma de serie por el diario británico "The Times", Agassi cuenta que en 1997 consumió el estimulante Crystal Meth (metanfetamina).
Sólo una carta llena de mentiras enviada a los rectores del circuito ATP impidió una sanción, afirma en el libro que saldrá a la venta en Estados Unidos el 9 de noviembre.
El ganador de ocho torneos de Grand Slam, campeón olímpico en Atlanta 1996 y tres veces campeón de la Copa Davis con EE.UU., cayó a fines de 1997 al puesto 141 del ranking y debió jugar torneos Challenger.
Entonces, un asistente le ofreció Crystal Meth (ver "La confesión..."). Cuando se encontraba en el aeropuerto neoyorquino de La Guardia, en 1997, recibió la llamada de un médico de la ATP, que le informó que había dado positivo en un control antidoping.
"Mi nombre, toda mi carrera, todo está en juego. Lo que logré, todo para lo que trabajé podría no significar nada", pensó Agassi. Dos días más tarde mintió en una carta a la ATP, pidió comprensión y clemencia y así evitó una sanción de tres meses: dijo que se trataba de una droga recreativa.
La ATP eludió cualquier responsabilidad sobre el tema, mientras que la Federación Internacional de Tenis se mostró sorprendida y decepcionada y defendió su programa de lucha contra el doping.
En 1998 Agassi regresó al top ten del ranking y en 1999 ganó Roland Garros y el US Open y acabó el año como número uno del mundo. Por aquel tiempo se transformó en uno de los jugadores más discretos y espirituales del circuito. Finalmente se retiró luego de casarse con Steffi Graf y de haberse convertido en uno de los seis jugadores que ganó los cuatro torneos "grandes".
Un adelanto de las revelaciones del ex N° 1 del ranking mundial
BUENOS AIRES.- En la edición on line de ayer del diario "The Times", el periodista Neil Harman revela algunas palabras de Agassi en la autobiografía.
"Estoy sentado con mi asistente, Slim. El está estresado también... Me dice: "¿querés volar conmigo? ¿Con qué? Gack. ¿Qué demonios es Gack? Crystal meth. ¿Por qué lo llaman Gack? Porque es el sonido que tu haces cuando estás volado... Te hace sentir como Superman, amigo. Entonces me oigo decir...¿Sabes qué? Al diablo... Sí, volemos. Slim tira una pequeña pila de polvo en la mesa de café. La corta y la aspira. La corta de nuevo y yo aspiro un poco. Me reclino en el sillón. Hay un momento de arrepentimiento, seguido de una vasta tristeza. Luego viene una corriente fuerte de euforia que barre con cada pensamiento negativo en mi cabeza. Jamás me había sentido tan vivo, tan optimista, y nunca con tanta energía. Me invade un desesperado deseo de limpiar. Recorro mi casa, limpiando de principio a fin..." (Especial)
Emocionante
"No puedo hablar de adicción, pero muchos dirían que si se usa algo como una escapatoria se tiene un problema. No me preocupa la reacción de mis fans, yo sólo sé que me he puesto el corazón en la boca y mis sentimientos siempre estuvieron escritos en mi cara. En realidad encontré muy emocionante poder contar toda la historia al mundo", dijo Agassi ayer al diario "The New York Times"
La mentira
"Dije en una carta a la ATP que fue un descuido, que bebí de la copa de soda de mi amigo Slim y que de forma involuntaria su droga pasó a mí. La carta estaba llena de mentiras con algunos puntos de verdad. Me siento avergonzado, por supuesto. Me prometo a mí mismo que esta mentira (la carta) es el final de un triste capítulo. La ATP revisó el caso y lo desechó", escribió Agassi en la autobiografía.
Sólo una carta llena de mentiras enviada a los rectores del circuito ATP impidió una sanción, afirma en el libro que saldrá a la venta en Estados Unidos el 9 de noviembre.
El ganador de ocho torneos de Grand Slam, campeón olímpico en Atlanta 1996 y tres veces campeón de la Copa Davis con EE.UU., cayó a fines de 1997 al puesto 141 del ranking y debió jugar torneos Challenger.
Entonces, un asistente le ofreció Crystal Meth (ver "La confesión..."). Cuando se encontraba en el aeropuerto neoyorquino de La Guardia, en 1997, recibió la llamada de un médico de la ATP, que le informó que había dado positivo en un control antidoping.
"Mi nombre, toda mi carrera, todo está en juego. Lo que logré, todo para lo que trabajé podría no significar nada", pensó Agassi. Dos días más tarde mintió en una carta a la ATP, pidió comprensión y clemencia y así evitó una sanción de tres meses: dijo que se trataba de una droga recreativa.
La ATP eludió cualquier responsabilidad sobre el tema, mientras que la Federación Internacional de Tenis se mostró sorprendida y decepcionada y defendió su programa de lucha contra el doping.
En 1998 Agassi regresó al top ten del ranking y en 1999 ganó Roland Garros y el US Open y acabó el año como número uno del mundo. Por aquel tiempo se transformó en uno de los jugadores más discretos y espirituales del circuito. Finalmente se retiró luego de casarse con Steffi Graf y de haberse convertido en uno de los seis jugadores que ganó los cuatro torneos "grandes".
Un adelanto de las revelaciones del ex N° 1 del ranking mundial
BUENOS AIRES.- En la edición on line de ayer del diario "The Times", el periodista Neil Harman revela algunas palabras de Agassi en la autobiografía.
"Estoy sentado con mi asistente, Slim. El está estresado también... Me dice: "¿querés volar conmigo? ¿Con qué? Gack. ¿Qué demonios es Gack? Crystal meth. ¿Por qué lo llaman Gack? Porque es el sonido que tu haces cuando estás volado... Te hace sentir como Superman, amigo. Entonces me oigo decir...¿Sabes qué? Al diablo... Sí, volemos. Slim tira una pequeña pila de polvo en la mesa de café. La corta y la aspira. La corta de nuevo y yo aspiro un poco. Me reclino en el sillón. Hay un momento de arrepentimiento, seguido de una vasta tristeza. Luego viene una corriente fuerte de euforia que barre con cada pensamiento negativo en mi cabeza. Jamás me había sentido tan vivo, tan optimista, y nunca con tanta energía. Me invade un desesperado deseo de limpiar. Recorro mi casa, limpiando de principio a fin..." (Especial)
Emocionante
"No puedo hablar de adicción, pero muchos dirían que si se usa algo como una escapatoria se tiene un problema. No me preocupa la reacción de mis fans, yo sólo sé que me he puesto el corazón en la boca y mis sentimientos siempre estuvieron escritos en mi cara. En realidad encontré muy emocionante poder contar toda la historia al mundo", dijo Agassi ayer al diario "The New York Times"
La mentira
"Dije en una carta a la ATP que fue un descuido, que bebí de la copa de soda de mi amigo Slim y que de forma involuntaria su droga pasó a mí. La carta estaba llena de mentiras con algunos puntos de verdad. Me siento avergonzado, por supuesto. Me prometo a mí mismo que esta mentira (la carta) es el final de un triste capítulo. La ATP revisó el caso y lo desechó", escribió Agassi en la autobiografía.
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