24 Septiembre 2009
Los tiempos van cambiando. Si antes estaba prohibido usar una camisa a cuadros con una corbata a rayas, hoy está permitido. Sólo que hay un secreto: se deben mantener los mismos tonos en algún detalle. Pero hay costumbres que no cambian ni siquiera con la moda, simplemente porque es desagradable. Es el caso del uso de los mocasines o de los zapatos de vestir (¡menos!) sin medias.
Hay otros hábitos que no quedan bien, pero que se toleran, por ejemplo, subir al avión de joggins y zapatillas. Salvo que se trate de un deportista profesional, este look no es el más elegante. Como tampoco lo es la combinación de corbata blanca sobre camisa negra (no es lo mismo que la corbata sea de seda gris). Lo que nunca cambia es la combinación de colores a la hora de vestir el traje.
El marrón jamás puede ir con una camisa verde, lo mismo que un traje negro no puede llevarse junto con una corbata azul oscura, porque se perdería visualmente. Un error común es ponerse una camisa con botón en el cuello (desprendido) y, encima, colocarse una corbata. También se desaconseja el uso de un saco de vestir con jeans y camisa. Aunque esto no es tan mal visto como los pantalones al tobillo ("como para cruzar un río", se decía antes).
Secretos para disimular defectos
Cuello ancho.- Hay que procurar que las camisas tengan cuello en punta, en lo posible bien largos, para causar el efecto contrario.
Hombros chicos.- El saco, por tener hombreras, forma los hombros y le da el ancho ideal. Las camperas, en cambio, no tienen ese poder.
Kilos de más.- lo mejor es utilizar suéteres de poca estructura, muy livianos y a la altura de la cadera, pero sin puño, para evitar que se marque la panza.
Baja estatura.- Si la persona pesa hasta 85 kilos puede usar ropa al cuerpo. Un pantalón angosto estiliza mucho. La botamanga no debe ser ancha. Además el pantalón debe tener un largo que se mide justo donde comienza el taco del zapato.
Corpulento- La gente de estructura grande tiene que tratar de usar ropa con caída, telas que pesen. También son mejores los colores oscuros que adelgazan, igual que las rayas verticales.
Caderas anchas.- En estos casos es preferible usar pantalones oscuros, sin pinzas, y de telas con mucha caída pero livianas. Por ejemplo, una persona con caderas anchas deben evitar géneros como el corderoy de rayas finas o gruesas.
Hay otros hábitos que no quedan bien, pero que se toleran, por ejemplo, subir al avión de joggins y zapatillas. Salvo que se trate de un deportista profesional, este look no es el más elegante. Como tampoco lo es la combinación de corbata blanca sobre camisa negra (no es lo mismo que la corbata sea de seda gris). Lo que nunca cambia es la combinación de colores a la hora de vestir el traje.
El marrón jamás puede ir con una camisa verde, lo mismo que un traje negro no puede llevarse junto con una corbata azul oscura, porque se perdería visualmente. Un error común es ponerse una camisa con botón en el cuello (desprendido) y, encima, colocarse una corbata. También se desaconseja el uso de un saco de vestir con jeans y camisa. Aunque esto no es tan mal visto como los pantalones al tobillo ("como para cruzar un río", se decía antes).
Secretos para disimular defectos
Cuello ancho.- Hay que procurar que las camisas tengan cuello en punta, en lo posible bien largos, para causar el efecto contrario.
Hombros chicos.- El saco, por tener hombreras, forma los hombros y le da el ancho ideal. Las camperas, en cambio, no tienen ese poder.
Kilos de más.- lo mejor es utilizar suéteres de poca estructura, muy livianos y a la altura de la cadera, pero sin puño, para evitar que se marque la panza.
Baja estatura.- Si la persona pesa hasta 85 kilos puede usar ropa al cuerpo. Un pantalón angosto estiliza mucho. La botamanga no debe ser ancha. Además el pantalón debe tener un largo que se mide justo donde comienza el taco del zapato.
Corpulento- La gente de estructura grande tiene que tratar de usar ropa con caída, telas que pesen. También son mejores los colores oscuros que adelgazan, igual que las rayas verticales.
Caderas anchas.- En estos casos es preferible usar pantalones oscuros, sin pinzas, y de telas con mucha caída pero livianas. Por ejemplo, una persona con caderas anchas deben evitar géneros como el corderoy de rayas finas o gruesas.
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