Cuando el baile estaba organizado

En las fiestas de la alta sociedad desde fines del siglo XIX hasta aproximadamente el fin de la segunda década del XX, si estaba previsto el baile, este se desarrollaba de acuerdo a una estricta organización. En primer lugar, la orquesta -que era de rigor- tocaba solamente un número determinado de piezas (hoy se diría "temas") durante la noche. En segundo, las parejas solteras se armaban antes de empezar la música, y de acuerdo a las constancias de un "carnet de baile". El caballero solicitaba un baile determinado y, si la señorita consentía, quedaba anotado en el carnet que cada una portaba en su cartera de fiesta.
Ese carnet era una pequeña cartulina doblada, cuidadosamente impresa para la ocasión. Allí estaban enumeradas las piezas a ejecutarse en la velada, así como su orden. De una perforación en la esquina del carnet, salía el cordón de seda que sujetaba un minúsculo lápiz. Con este, la dama escribía el nombre (a veces sólo las iniciales) del solicitante, sobre la línea punteada junto al nombre de cada música. A veces, lo extendía al caballero para que él mismo se anotase.
Ilustra esta nota un carnet de baile "de reglamento" del Club Social de Tucumán, del 24 de setiembre de 1905. La orquesta ejecutaba los bailes un total de 24 veces, a razón de 12 en la primera parte y otras tantas en la segunda. El orden de las piezas en la primera parte era: Lanceros, Pas de quatre, Vals, Polca. Luego se repetían Vals, Lanceros, Vals; una nueva, el Pas de Patineurs, y después Lanceros, Vals, Pas de quatre y Vals.
En la segunda parte, el orden era ligeramente distinto, pero siempre se trataba de las mismas piezas. El baile se cerraba con el Galop Final.
Los Lanceros era una suerte de cuadrilla, "en cuyas figuras o mudanzas las parejas se saludan, se visitan, desfilan paralelamente, etcétera", informan las obras de referencia.
El Pas de quatre era un baile de cuatro tiempos, parecido al schotis.
El Pas de patineurs también tenía cuatro movimientos, en uno de los cuales el caballero cruzaba un pie en el aire, al modo de los patinadores.