A los 67 años consumó una proeza en El Cadillal

A los 67 años consumó una proeza en El Cadillal

Jorge Renosto volvió a Tucumán después de cuatro décadas y se animó a realizar la espectacular "pirámide".

17 Mayo 2009

El 20 de agosto de 1967 en las aguas del dique “Celestino Gelsi”, en El Cadillal, se realizó por primera vez un show acuático. En aquella ocasión se hicieron presentes los mejores exponentes del deporte náutico nacional. Entre ellos estaba Jorge Daniel Renosto, actual presidente de la Federación Argentina de Esquí Acuático.
En ese entonces, un grupo de jóvenes causó sensación con rutinas fuera de lo común. Efectuaron piruetas; entre ellas, esquiar sin los elementos habituales en los pies. Las maniobras hicieron delirar al público, y entre los que las ensayaron Renosto ocupó un rol protagónico, sobre todo en una denominada “pirámide humana”.
Casi 42 años después, el deportista y dirigente volvió a la provincia, en ocasión de la fecha de 2009 del Campeonato Argentino de esquí náutico. Renosto, hoy de 67 años, no se limitó a sus funciones de fiscalizador: salió a la pista y se animó a armar otra vez una pirámide, que esta vez concluyó con un espectacular salto mortal hacia atrás.
“Cuando vine la primera vez todo era muy diferente. El camino era de tierra y ripio, la vegetación era muy agreste y el dique todavía se estaba llenando”, recordó Renosto.
El actual dirigente comenzó a transmitir sus conocimientos en 1965. Entre 1972 y 1976 se dedicó por completo a la competencia. Pero en 1977 decidió cambiar su vínculo con el esquí. “Cuando me recibí no podía dedicarle mucho al deporte. Por ejemplo, para practicar figuras y mantener un nivel internacional no era suficiente”, explicó.
Renosto no sólo acumuló experiencia como deportista y dirigente: también sumó conocimientos como juez internacional y es palabra autorizada para diagnosticar la plaza tucumana. “Es una sede muy importante, principalmente porque en pocos minutos se llega en vehículo. El club cuenta con una buena infraestructura y si hay mucho viento la cancha puede desplazarse hacia otros sectores. Además, el clima permite que casi durante 11 meses se pueda practicar esquí, mientras que en Buenos Aires sólo seis meses son aptos”, destacó Renosto.
Justamente, estas características que enumeró Renosto son las que el grupo de esquiadores locales explota durante casi toda la temporada, para que Tucumán sea una plaza fuerte. Voluntad les sobra, ahora buscan apoyo.

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