Atanor acepta un esquema de controles en el sector azucarero

Atanor acepta un esquema de controles en el sector azucarero

"El Gobierno debe participar como administrador", sostuvo Miguel Angel González.

ESTRATEGIA. Las últimas inversiones en los ingenios de Atanor se circunscribieron al cuidado ambiental. LA GACETA / ENRIQUE GALINDEZ ESTRATEGIA. Las últimas inversiones en los ingenios de Atanor se circunscribieron al cuidado ambiental. LA GACETA / ENRIQUE GALINDEZ
04 Mayo 2009
"Que haya algún tipo de regulación; que alguien se ocupe de ir mirando y controlando, como hace todo administrador; que se busquen mercados alternativos y que el mercado interno esté asegurado no me parece mal. El Gobierno tiene que participar como un administrador que va cuidando que nadie haga macanas". De esta forma, el presidente de Atanor, Miguel Angel González, se manifestó sobre el proyecto del Gobierno tucumano, de propiciar una entidad privada que se ocupe de controlar la comercialización del azúcar. Atanor es propietaria de los ingenios Concepción, Marapa y Leales.
"Es una buena iniciativa del Gobierno, porque indica que comienza a dialogar con productores. Hoy empieza con los azucareros y mañana puede ser con los sojeros, con los citricultores, o con los tabacaleros", remarcó González.
En diálogo telefónico con LA GACETA desde Buenos Aires, el titular de Atanor confirmó que esta empresa será la mayor aportante en el proyecto de construcción de una deshidratadora de alcoholes en Tucumán, junto con Refinor. "No sé finalmente cómo quedará la sociedad; lo que estamos tratando ahora es el proyecto para presentarlo antes del 14 de mayo. Y los departamentos de ingeniería de Atanor y de Refinor están trabajando juntos para un proyecto en línea para empezar a fabricar y después ampliar, porque la participación de etanol en las naftas irá creciendo con el tiempo. No puede ir Atanor solo", subrayó. Adelantó que la obra demandará una inversión total de entre U$S 60 millones y U$S 70 millones. "Refinor pone una parte y Atanor la otra", indicó. Opinó que se llegará con los plazos para abastecer de alcohol para las naftas a partir de 2010, como establece la Ley de Biocombustibles. "Buscamos que la planta deshidratadora comience a construirse lo más rápido posible. Acá lo que demora no es la construcción, sino la ingeniería básica y la de detalles", aseguró.
Por otra parte, González se refirió a los rumores sobre una crisis que afectó a Atanor en 2008. "Para Atanor, lo peor de la crisis está pasando. Tuvo dificultades financieras de todo tipo; el último cuatrimestre del año pasado para nosotros fue una cosa insólita: los precios de nuestros productos y los de nuestros clientes se dividieron por tres. O sea, compramos tres veces más caro y lo que vendemos bajó tres veces", resaltó. "Usualmente -añadió-, cuando ocurre esto viene el banco y ayuda, pero ahora los bancos no podían hacerlo porque también estaban con problemas. Ahora Atanor está perfectamente, y pasamos el momento. Ahora Atanor tiene más demanda de la que puede abastecer".
Pronosticó que para la Argentina este año que empezó "será excelente, porque la gente se va a privar de muchas cosas, pero menos de comer. En tiempos de recesión, la gente tiende a acopiar alimentos". Explicó que la Argentina no entrará en recesión porque el país produce lo que los demás quieren. "Argentina elabora bienes primarios, agroalimentos, que tendrán una demanda por encima de lo habitual. Va a ser un buen año para el azúcar también", vaticinó González.
Comentó que las inversiones fundamentales realizadas por  Atanor en sus ingenios fueron todas ambientales. "Cumplimos con el Programa de Reconversión Industrial (PRI) antes del tiempo establecido. La gran mayoría de las inversiones en los tres ingenios fueron para cumplir con el PRI", señaló. Dijo que en los ingenios de Atanor la zafra arrancaría entre mediados y fines de este mes.
"Debemos buscar mercados alternativos para no sobrecargar la demanda nacional de azúcar. Tampoco se debe exportar todo al mismo lugar; hay que diversificar los mercados, una tarea que le toca al empresario. Es importantísimo que se tome conciencia de esta situación", concluyó González.

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