Afirman que 300.000 celularesson robados por mes en el país

BUENOS AIRES.- Las empresas de servicio de telefonía móvil reciben un total de 300.000 denuncias por robos de celulares en todo el país, indicaron voceros de ese sector. La cifra, según especialistas, pone de manifiesto el negocio clandestino de venta de este tipo de aparatos.
"Ya sea para intercomunicarse entre grupos operativos en acción delinquiendo, negociar rescates a través de postas en secuestros express, extorsivos y hasta virtuales, los teléfonos celulares constituyen un eslabón de la cadena logística del delito casi insustituible", señaló el especialista en seguridad Luis Vicat.
El experto agregó: "si a ello le agregamos el negocio de los chips y tarjetas de crédito, descartables y falsificables, respectivamente, se compone un cuadro preocupante a la hora de contener este fenómeno colateral a delitos mayores". Voceros del sector dedicado al servicio de telefonía celular indicaron: "las 300.000 denuncias mensuales (por el robo de celulares) es una cifra casi inamovible". Además, revelaron que la cantidad de aparatos en circulación en la actualidad alcanza los 47 millones.
Fuentes policiales revelaron que la mayor cantidad de denuncias y reclamos son por arrebatos de celulares y explicaron que "los pirañas" -chicos que salen a cazar teléfonos- son contratados por adultos que les compran los equipos por monedas. En 2008, el 8% de los usuarios sufrió el robo de su equipo, y son Constitución, Once, Retiro, Puerto Madero, Recoleta y las estaciones de subterráneo las zonas más críticas en la Ciudad de Buenos Aires.
"El problema de los robos de celulares creció muchísimo en los últimos tiempos, y actualmente hay hechos que se registran incluso dentro de los medios de transporte, por lo que debe evitarse escuchar música con auriculares conectados a los celulares, ya que los sentidos de defensa disminuyen considerablemente, detalle que los delincuentes
tiene en cuenta", indicó el especialista en seguridad personal Néstor Fortunato.
El experto prosiguió: "es innumerable la cantidad de episodios que ocurren cuando el ciudadano está subiendo a los colectivos, donde sufre el manoteo del equipo desde atrás, mientras un cómplice lo frena por delante y simula preguntar algo a los choferes". "El delincuente callejero -añadió- aprovecha distracciones y descuidos. La prevención pasa por estar alertas, cuidando de no exhibir los equipos". Se calcula que hay en el área metropolitana de Buenos Aires, unas 1.000 cuevas, donde comerciantes ilegales compran equipos robados, los liberan y luego los venden. (NA)