El chateo no reemplaza el encuentro cara a cara

En estos tiempos tecnológicos, los amigos on line están a la orden del día. "En mi caso, el chat y el mail me sirven para poder mantener amistades que cultivé durante un año de intercambio en Estados Unidos", afirmó Gabriela Mariani, una joven estudiante de Derecho de 23 años.
"Gracias a internet, puedo seguir comunicándome después de cinco años con una amiga canadiense llamada Louise, y con un amigo rosarino, Christian", dijo la joven a LA GACETA.
Sin embargo, la tecnología no sólo es un recurso para mitigar distancias. La propia Gabriela reconoce que chatea por lo menos tres veces por semana con sus amigas que residen en Tucumán. "Es posible que estemos chateando por la tarde del viernes, y por la noche nos juntamos para ir a algún boliche. Y lo curioso es que muchas veces conversamos más a través del chat que cuando nos encontramos personalmente; porque en los boliches, por el ruido, por la gente, te dispersás. En cambio, cuando estás en la compu, te concentrás más en el tema del que estás hablando", afirmó Gabriela.
El testimonio de la joven ratifica los resultados a los que llegó la investigadora Gabriela Palazzo, que analizó el uso del chat en las comunidades de jóvenes. " El hecho de que se comuniquen por el chat no significa que se haya perdido el encuentro cara a cara", afirma la especialista.