Escupió una Apacheta.

29 Nov 2015
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Apacheta en el camino

Luego de llegar a la encrucijada, el joven escupió la Apacheta y se sentó. Descansó unos minutos y siguió su camino.

No era un gesto de desprecio, se trataba de una ofrenda. Era la saliva que el viajero ofrecía al "espíritu del lugar".

La Apacheta o Apachita es un conjunto de piedras que se encuentran en lugares liminales (relativo al umbral o entrada). Se hallan principalmente en Latinoamérica, aunque también se han encontrado en el archipiélago de Badar, en las islas Salomón y Bank, en Irlanda y en Gales. Uno de sus fines es que el viajero se despoje de la fatiga y recobre las fuerzas perdidas para continuar su derrotero.

Me llamaron la atención, tanto las ofrendas como el lugar en donde se construyen las Apachetas. Piedras, coca mascada, maíz, uñas, saliva, pestañas, plumas e incluso dinero es ofrendado en sitios muy especiales; valles o aberturas entre montañas, encrucijadas, portezuelos (caminos entre montañas), cumbres y cuestas.  

Estos lugares simbolizan la tensión de poderes opuestos que se enfrentan y neutralizan y obligan al caminante a entrar en relación recíproca entre un camino y otro, entre el llano y la cumbre,  entre lo claro y lo oscuro. El caminante pierde allí homogeneidad para entrar a una realidad indeterminada e inestable. Es un lugar de tránsito.

Por otro lado la entrega de partes de su cuerpo, como es la saliva, las uñas o las pestañas, como así también de sus posesiones, representan una vitalidad ofrecida y donada para poder pasar por esa "puerta" con las energías repuestas para seguir el camino.

Veo en la mediación y en el diálogo colaborativo una Apacheta. El conflicto es el producto de la tensión de fuerzas que pugnan y tiran cada una hacia un lugar diferente. En un inicio, hay apariencia de contradiccón y desarmonía. En la mesa, las partes están tan distantes como cercanas. La audiencia es un estado de apertura y ambigüedad, un misterioso intermedio entre lo separado y lo unido.

La liminalidad, dice Van Gennep, se relaciona con la communitas, una comunión entre los sujetos sociales que sobrepasa las especificidades de la estratificación. ¿No es eso lo que pasa en la Apacheta de la Mediación?

Los sujetos y el mediador, a veces con dolor, ponen su cuerpo en las audiencias y se despojan de sus títulos, de su status, de su lugar de seguridad e incluso de sus posesiones para pasar el umbral y seguir el camino siendo más humanos, más universales, más equilibrados.

¡Hasta la próxima encrucijada!


Nota del bloguero:

No escapa al autor la existencia de diversos significados de "Apacheta" y de los motivos por los cuales se realizan las ofrendas. Sin embargo he elegido el sentido expuesto por considerarlo más adecuado a los fines del artículo.   



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