Entrevista a Pablo Vigliano de Ouroboros Ediciones
Después de la desaparición de las grandes
editoriales argentinas como Columba o Record, los editores independientes se
convirtieron en una de las figuras más importantes del panorama del cómic
contemporáneo nacional. Gracias al espacio que generan, los autores emergentes
pueden darse a conocer y también podemos disfrutar de nuevos cómics nacionales.
La editorial independiente y de autoedición Ouroboros, fue creada por Pablo
Vigliano, junto a un grupo de
dibujantes y un diseñador gráfico.
Pablo es tucumano de
nacimiento y como buen comiquero, es fan de las historietas desde antes de aprender a leer. Hojeaba Patoruzú,
El Zorro y los superhéroes mientras inventaba lo que decían los personajes en
los globos de díalogo. Con el tiempo se convirtió en cinéfilo, amante de la
buena literatura y por supuesto, comiquero refinado. Además es comunicador
social made in Universidad Nacional de la Plata.
Tiene el orgullo de formar parte del grupo de
redacción de la revista digital Axxón (www.axxon.com.ar), de género fantástico
y ciencia ficción, en donde se publicaron dos cuentos de su autoría. Además
publicó en dos tomos de la antología de cuentos de terror nacional, Pelos de Punta.
-¿Cómo nace Ouroboros Ediciones?
Nace de una intención conjunta con amigos dibujantes
y un diseñador gráfico de publicar material que teníamos guardado y otro nuevo
que seguíamos produciendo o que teníamos ganas de producir. Para empezar, lo
más conveniente nos pareció lanzarnos con una novela gráfica, que es una
historia única, autoconclusiva, separada por capítulos, que atraviesa distintos
géneros, y que en su formato de libro causa más impacto a la visual del lector:
tapa acartonada, lomo, solapas, tamaño, calidad de papel, todos elementos
tenidos en cuenta a la hora de publicar la mejor edición posible, apostando a
que la iniciativa funcione, se auto sustente y se puedan publicar más libros.
Ouroboros
nace también de la existencia de una situación coyuntural de escasa
participación del sector privado en esta área. Basta hacer un inventario para
notarlo y distinguir sus historietas o ilustradores. Con lo cual el gran
engranaje para que la actividad independiente funcione, son la distribución de
material en las comiquerías, y los puntos de encuentro como los eventos y
convenciones de libros e historietas que se están generando en todo el país.
-¿Cuál es su política a la hora de
seleccionar el material que van a publicar?
Al menos por ahora autoeditamos nuestro material. En
todo caso sumamos artistas a nuestros proyectos. Cuando avanzamos sobre alguno,
tratamos de ponernos de acuerdo en que sea una historia que atraviese distintos
géneros y en la que cada uno se sienta a gusto con la parte que va a trabajar.
Como guionista, me gusta conocer a los dibujantes para que cada uno se maneje
dentro de un género que le guste y donde se sienta cómodo.
Otra de las consideraciones que hacemos es fijar a
qué público apuntamos. Nuestros dos libros están destinados más que nada a un
público adulto, pero tampoco hay dibujos o narrativa que pudiera afectar a los
menores. No focalizamos demasiado nuestro público lector, por eso tratamos de
que la historia atraviese distintos géneros y tipo de situaciones.
-¿Cuál es el rol que tiene que tener hoy
un editor de cómics en Argentina?
Publicar la mejor obra posible, de calidad
artística, y comprometerse a que el libro circule y tenga su presencia en
eventos y convenciones, compromiso a tomar sobre todo cuando se publica la obra
de terceros. Nosotros nos ocupamos del trabajo creativo y de producción,
primero, y después también hay que ponerle el cuerpo a la asistencia en eventos
y convenciones. Nos asociamos a otros grupos de Rosario en nuestra misma
situación: Rabdomantes Ediciones y Fog of War. Juntos conformamos Asedio Colectivo Editorial, entonces
donde vamos llevamos el material de todos. El Colectivo es una alternativa
importante.
-¿Has descubierto autores inéditos que
valgan la pena editarse?
Hay muchos, sí. Lo que pasa es que como grupo de
autoedición independiente también tenemos limitaciones de costos y no estamos
editando libros de otros grupos creativos, al menos de momento. En nuestro caso
no todos los dibujantes del primer libro son los mismos que el segundo. Yo para
un próximo trabajo ya no quisiera ser guionista único, sino formar un equipo
con dos guionistas más. Hay muchos dibujantes talentosos, ahí en Tucumán vi excelentes
ilustraciones y dibujos por los chicos de Team
Kaboom, por ejemplo.
-¿El mercado desde el punto de vista de
editorial independiente permite que hayan series continuadas o tienen que
apostar por los tomos integrales?
Existe una clara preferencia hacia los tomos
integrales y autoconclusivos. Ya cuando cumplen estas características, suelen
ser tomos de más páginas que las historias continuadas, que por lo general
traen menos y son más chicas. Lo importante también es el libro como objeto: cuanto
mejor sea la edición y más lindo el formato final del libro, mejor todavía. No
hay que olvidar que se compite siempre también contra el formato digital. El
coleccionista, el amante del papel siempre agradece un buen producto final
digno de ocupar un lugar en su biblioteca.
También por una cuestión de costos es mejor trabajar en un tomo único, porque después puede ocurrir que no se sabe cuándo saldrá la continuación. Hay que tener en cuenta si ese potencial lector estaría dispuesto a comprar dos o más tomos para no perderse de nada. Pero más allá de esto, la tendencia es hacia la obra completa. Lo hacen así también DC y Marvel, que sacan a la venta tomos enormes en tapa dura, incluso ediciones de lujo exclusivas para coleccionistas.
-Finalmente, ¿En dónde podemos conseguir el material que editan? ¿Qué es lo
nuevo que están haciendo?
Nuestro material siempre está disponible en
comiquerías, como Legión Cómics. Lo
que estamos haciendo ahora es tratar de hacer circular nuestros libros. Se
viene un evento en Córdoba, Material, que vamos a ir como lo venimos haciendo
siempre, como Asedio Colectivo Editorial, y buscar estar presentes en la 43º
Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, que es muy importante. Es muy
posible que lo hagamos dentro del stand de la Provincia de Santa Fe, que lanzó
una convocatoria para los artistas independientes y siempre está apoyando toda
movida cultural. Lo mío con Ouroboros es siempre una apuesta a que las cosas
funcionen y si no siempre como guionista para seguir trabajando y publicando
novelas gráficas.